Problemas y soluciones del sistema eléctrico

Bienvenidos Kombinautas a un miércoles más de amorosos artículos sobre el tan temido tema de la mecánica de las kombis; aunque, si vienen siguiendo los posteos semanales que ya subimos acá ya sabés que el temor sobre el tema es más temible que el el tema en sí mismo. Como ven, estamos intentando facilitar toda la teoría de la mecánica de las kombis, elaborando pequeños artículos de manera clara y sencilla con la intención de recorrer cada rincón, cada pieza, cada sistema y cada engranaje de esa zona imprecisa y poco hablada en blogs que es el funcionamiento mecánico de nuestras preciosas máquinas.

Si ya leyeron el artículo de la semana pasada posiblemente ya sepan reconocer, nombrar y atribuir funciones a cada parte del sistema eléctrico de las kombis. Si aún no lo leíste, te lo entregamos en bandeja acá para que vayas a chusmear. Recomendamos su lectura previa antes de adentrarse en los temas de este artículo. Hoy nos dedicaremos a hablar de los problemas que pueden presentar el sistema eléctrico y también de sus posibles soluciones. Como ya saben, lo haremos uno por uno detallando los problemas y especificando qué hay que hacer para solucionarlos.

Fallo de la batería

Identificar un fallo en la batería es más fácil de lo que parece. Si tu kombi no enciende o pierde energía muy rápido posiblemente tengas un problema de fallo en la batería. Eso puede suceder por dos motivos: o la batería está descargada o está en mal estado. Que una batería se descargue es algo que puede pasar, ya el segundo caso posiblemente es debido a un mal uso, uso prolongado o falta de mantenimiento. 

Solucionar ese problema es bastante sencillo. Tenés que recargar la batería (y fijate de hacerlo con un cargador adecuado), si la batería ya llegó a su fin es necesario reemplazarla. Siempre recomendamos un mantenimiento adecuado pues ayuda a evitar esos fallos comunes y prolonga la vida útil no solamente de la batería sino que de varias otras piezas.

Problemas de carga

Identificarlos también es fácil: tenés un problema de carga si el proceso de cargar la batería es muy lento o si se interrumpe su flujo de energía. Las causas pueden ser en tres partes: 1) tenés un problema con el cableado, 2) el cargador presenta fallas, o 3) la fuente de alimentación externa no está en su completo funcionamiento. 

Para resolver ese tipo de problemas es necesario verificar cada ítem que nombramos más arriba e identificar de dónde surge el fallo. Asegurate de que todas las partes estén en buen funcionamiento y que los cables de carga estén en buen estado y conectados correctamente. En el caso de ser necesario los cables deben ser reemplazados y el cargador tiene que ser reparado. Lo que recomendamos, por experiencia, es que uses una fuente de alimentación confiable y estable, eso ayudará a evitar posibles fallos. 

Fallos en el motor eléctrico

Los fallos del motor eléctrico ya no son tan fáciles de percibir. Posiblemente tu motor eléctrico esté dañado si hay una pérdida de potencia, ruidos anormales o un sobrecalentamiento del motor. Eso puede suceder gracias a algún tipo de desgaste, a algún problema en los componentes del motor o hasta mismo un mal funcionamiento del controlador.

Para solucionar ese problema es necesario realizar un diagnóstico detallado. Con el diagnóstico hecho ya sabrás si es necesario reparar o reemplazar algún componente defectuoso o si el fallo viene del mismísimo motor o del controlador. También te recomendamos verificar los sistemas de ventilación, una falla ahí puede fácilmente generar un sobrecalentamiento del motor y dañar todo el sistema.

Fallos en el cableado

chasis kombi

Los fallos en el cableado tampoco son fácilmente detectables. Los problemas más comunes son los cortocircuitos, algunos cables dañados, desgastados o directamente muy viejos y las conexiones sueltas. Podrás percibir si tenés problemas de cableado si algo -y puede ser cualquier cosa, desde una falla en las lámparas, la radio que no prende, alguna luz que se enciende y apaga, hasta el fallo directo del motor- anda mal. Si alguna de estas cosas pasa posiblemente tengas un problema de cableado y las causas más probables son los desgastes, daños y/o una instalación incorrecta.

Solucionar ese problema no es tan completo. Debés inspeccionar visualmente todo el cableado, buscando daños y fisuras como cables pelados o sueltos. Es importante que lo hagas con la kombi apagada para evitar descargas eléctricas. Una vez que hayas detectado los daños es solo cuestión de realizar las reparaciones y los reemplazos según sea necesario y asegurarte de que las conexiones estén bien apretadas y seguras.

Fusibles quemados

Si tenés algún fusible quemado lo vas a saber fácilmente, eso porque algunos sistemas eléctricos directamente no funcionan debido a fusibles quemados. Así que si ves algún fallo en cualquier parte del sistema, andá por los fusibles primero, porque son fáciles de cambiar y te evitará que pierdas tiempo revisando el cableado, por ejemplo. 

Los fusibles pueden quemarse sea por una sobrecarga en el sistema o por un cortocircuito. Solucionar ese problema es bastante sencillo. En otros artículos ya habíamos recomendado que siempre tengan en mano una caja de fusibles. Cambiarlos es bastante sencillo, pero si tenés un fusible quemado, lo más probable es que existan problemas de otra índole, así que vale la pena revisar y detectar el problema real para que no tengas que cambiar los fusibles a cada veinte minutos.

Fallos en el sistema de control

Este es un punto no muy común, porque si el sistema de control presenta un fallo, posiblemente sea debido a un problema externo al sistema. Lo que queremos decir es que si algo anda mal en el sistema de control el origen del problema es o el controlador o los sensores, y eso va afectar todo el rendimiento del sistema eléctrico. 

Las causas de la falla pueden ser oriundas de daños en los componentes eléctricos o frutos de una mala calibración. Ya la solución, en estos casos, es más compleja puesto que no exige solamente conocimientos de mecánica sino también un bagaje grande de conocimientos eléctricos. Indicamos que consultes a un técnico especializado que pueda diagnosticar e identificar con precisión el origen del problema en el controlador y/o reemplazar los sensores defectuosos. Es importante asegurarse de que el sistema de control esté siempre actualizado y correctamente calibrado.

Problemas de iluminación

Acá los problemas también son muy fáciles de detectar. Los fallos más comunes son las luces intermitentes, y problemas con los faros, y las causas pueden ser conexiones sueltas, problemas en los interruptores o, lo más común, que se te haya quemado la bombilla de luz. 

Para solucionar ese problema lo primero que hay que hacer es identificar de dónde viene, o sea, inspeccionar conexiones y cables, revisar los interruptores e incluso ver el estado de los fusibles. Si el problema no viene de ahí posiblemente tengas una bombilla de luz quemada, en este caso, basta con reemplazarla.

Fallos en los sistemas de climatización

sistema refrigeracion kombi

Los fallos de climatización también son fácilmente detectables. Te darás cuenta si hay un problema cuando el interior de la kombi no se enfría o no se calienta adecuadamente. Las posibles causas pueden ser tres: fugas en alguna parte del sistema, daños en el compresor o problemas en los controles. 

Para solucionar estos problemas hacé una inspección en el sistema de climatización buscando posibles fugas y, si no las hay, verificá el funcionamiento del compresor. También podés hacer una revisión en los controles y ajustarlos para asegurarte que tu sistema de climatización esté funcionando perfectamente. 

Hasta acá llegamos hoy, kombinautas. Les esperamos la semana que viene con más información sobre mecánica.

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