¿Qué ver en una kombi antes de comprarla? Legalidades PT. 2

volkswagen t1.5

Buen Miércoles a todos los kombinautas que están de guardia hasta esa hora. Ustedes, los fuertes que aguantaron el lunes, se quedaron bien parados el martes y resisten este miércoles con la esperanza de que el jueves anuncie la llegada del viernes, ustedes son los que leerán de primera mano el articulazo que venimos preparando esta semana. Con este post ya casi cerramos la serie de qué ver en una kombi antes de comprarla y nos mandamos para adelante rumbo al sueño. 

Los que tienen buena memoria saben que hace dos semanas hablamos bastante sobre cómo los griegos veían la filosofía, o, mejor dicho, como planteaban el problema de los sentidos y el pensamiento. Con el mito de Edipo explicamos en grandes rasgos que la visión puede engañarnos bastante a la hora de tomar decisiones. ¡Para!, ¿no sabés de lo que estamos hablando? No pierdas el tiempo y entrá acá, pero después volvé porque este artículo sigue la misma línea y picantea aún más el problema de la visión.

Vimos que Edipo se dejó llevar por el mundo sensible y terminó bastante mal, tan mal que al final se pincha los ojos para nunca más ser engañado. Bueno, este artículo esta hecho a encargo para que no te pase lo mismo a vos, porque amamos a nuestra comunidad y no queremos que nadie salga herido al comprar una kombi. Queremos más bien que pase al revés, y que todos los que nos acompañan salgan orgullosos con su nueva compañera de viaje. 

Por eso, muy atentos ahora, ya que los problemas que vamos a explicar, estos sí, son absolutamente invisibles. Se tratan de legalidades, y muchas veces es ahí en donde caímos en la trampa de los ojos. El estado de legalidad no está estampado en el vidrio, no está escondido abajo del banco -aunque esté escondido en un lugar que te vamos a contar- no se ve a simple vista, así que, por más paradojal que suene, ¡ojo!

Vamos entonces. Supongamos que encontraste una kombi que te dejó babeando. La chapa se parece a una cutis de durazno, las ruedas están como nuevas, los adornos de metal brillan más que los techos en oro de la Capilla Sixtina y encima la kombi está publicada por el precio de diez asados. Todo muy surreal. Con eso no queremos decir que por ahí fue un grande hallazgo, pero lo mejor sería sospechar si encontrás una kombi así. Para que no termines como nuestro héroe trágico, te recomendamos seguir estos tips.

Papeles (cédula verde)

cedula verde kombi

Esa es la parte burocrática y para muchos la parte más aburrida del proceso de adquisición de una kombi, pero también es la más importante. Tenés que fijarte si el número del motor coincide con el número del chasis. Para eso tendrás cierto trabajo, pues vas a tener que hurgar en el piso hasta encontrar el número y después mirar como un halcón el motor para fijarte si coinciden. Si son la misma serie numérica, está todo bien. Pero si son distintos, está todo mal. Primero porque tu kombi puede ser un Frankenstein de piezas de distintos lugares y segundo porque el motor puede haber sido extraído de alguna otra kombi de procedencia indefinida. Te lo decimos bien en criollo: robada. 

Fíjate que el dueño no sea un fiambre

kombi estetica

Lo que hay que hacer, por más increíble que parezca, es fijarse si el dueño está vivo. Ya sabemos que es una locura lo que te estamos planteando, pero es así. Por cuestiones legales, el propietario de la Kombi, el que puso su nombre en los papeles, es el único que puede hacer el pase oficial del vehículo. Existen casos especiales, pero son realmente muy, pero muy especiales, y te lo explicaremos en un artículo bastante detallado sobre autos de herencia. 

Brasil es un caso aparte ya que las kombis se hicieron ahí hasta los años 90 y con relanzamientos especiales, pero en el resto de Latinoamérica la historia fue distinta. Las kombis en países como Argentina y Uruguay, suelen ser autos muy viejos, con lo cual el número de traslados de dueños es, en la gran mayoría de los casos, impresionante. Y eso implica que, en una u otra operación de venta, no se hizo como se debería el cambio de nombre y a vos te vendan una kombi cuyo propietario fue un tal Arturito que se murió en la guerra del Paraguay. Y si llega a pasar eso, ahí si que te jodiste mi querido lector, porque nunca podrás probar que el auto que manejás es realmente tuyo. Así que es importante que el dueño esté vivo y que esté dispuesto a firmar la transferencia.

Verificaciones

manual para idiotas cap 5 al 7

Hay básicamente dos tipos de verificaciones que se pueden hacer para saber el estado legal del vehículo que vas a comprar. La verificación técnica, la haces por internet con la patente del vehículo, es la más sencilla de todas y te permitirá saber si el auto tiene multas pendientes, o si la licencia de las patentes fueron renovadas (en algunos países a partir de cierto tiempo no es más necesario, así que si estás muy ansioso y no querés esperar la série de artículos que vamos a sacar sobre la kombi, país por país, verificá atentamente cómo funcionan esas reglas en el tuyo).

La otra verificación no es tan sencilla, se llama verificación policial y es la instancia en la que las autoridades policiales de tu país verifican si el número del motor y el número del chasis coinciden con el número que está en los papeles. Esa verificación es muy importante ya que de ahí sale si el auto tiene un pedido de captura, o sea, si sufrió un hurto y lo declararon robado. Pero también sirve para saber si el motor es el mismo. Es muy importante que vayas a la policía a hacer esa verificación, para que no pase de que algún día te pare la yuta y ellos verifiquen por su parte que el número de motor y la información de los papeles no coincide. Si pasa eso, perdiste tu auto. 

Esos son los tres tips básicos sobre el aspecto legal de la kombi que vas a comprar. Insistimos que es muy importante hacerlo, al mismo tiempo que sabemos que es la parte más aburrida. Siempre desconfiá cuando encuentres una kombi en muy buen estado y a buen precio, pues este tipo de autos ya se transformó en un lujo y en pieza de colección para muchos. Aun así, si encontraste y querés mandarte a ver si por ahí le clavas una directo en el blanco, cumplí con el protocolo de legalidad que te dejamos. Eso evitará trastornos futuros y te dejará más tranquilo cuando estés en la ruta conduciendo tu sueño. 

Hasta acá llegamos, te esperamos el próximo miércoles con el cierre de esta seguidilla de artículos/tips sobre qué ver antes de comprar una kombi. ¡Hasta el miércoles!

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